LA CUARESMA 2024: Dia 7 - VIDA DE CRISTO

LA CUARESMA 2024: Dia 7 - VIDA DE CRISTO

LA CUARESMA 2024: DIA 7 – Miércoles Febrero 21

 

“Ahora que Nuestro Señor había superado la suprema tentación de llegar a ser el Rey de los hombres al llenar sus estómagos, al entretenerlos con señales científicas, y al hacer un trato político con el príncipe de la oscuridad, El estaba listo de enfrentar al mundo como victima sacrificial para el pecado.

 

“He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.” (Juan 1:29) Juan [el Bautista] estaba afirmando que no debemos buscar primero a un maestro, un dador de preceptos morales o un hacedor de milagros. Primero debemos encontrar Aquel que había sido designado como sacrificio por los pecados del mundo. La Pascua se estaba acercando, y los caminos estaban llenos con gente llevando o cargando sus corderos de un año al templo para ser sacrificados. En plena vista de esos corderos, Juan señaló al Cordero Quien, después de ser sacrificado, culminaría con todos los sacrificios en el templo, porque El quitaría los pecados del mundo.

 

Juan fue la voz saliente del Antiguo Testamento, en el cual el cordero jugó  un papel tan importante. En Génesis, encontramos a Abel ofreciendo un cordero, la primicia de su redil, en un sacrificio sangriento por la expiación del pecado. Luego, Dios le pidió a Abraham que sacrificara a su hijo Isaac – un símbolo profético del Padre Celestial sacrificando a Su propio Hijo. Cuando Isaac preguntó “¿Dónde está el cordero?” Abraham dijo: “Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hijo mío.” (Génesis 22:8)

 

La respuesta a la pregunta, “¿Dónde está el cordero para el holocausto?” hecha en el principio de Génesis, ahora fue dada por Juan el Bautista mientras señalaba a Cristo y dijo, “He aquí el Cordero de Dios.” Dios al fin había provisto un Cordero. Cada familia trataba de tener su propio cordero pascual; y los que ahora llevaban sus corderos a Jerusalén, donde el Cordero de Dios dijo que tenía que ser sacrificado, entendían que el cordero era un símbolo de la liberación de Israel de la esclavitud política de Egipto. Juan estaba diciendo que también era un símbolo de la liberación de la esclavitud espiritual del pecado.

 

El cordero muchas veces se usaba como una víctima de sacrificio, por su inocencia y su mansedumbre; por lo tanto, era un símbolo bien apropiado para el carácter del Mesías. El hecho de que Juan el Bautista Lo llamó el Cordero de Dios es bien significante; no era el cordero del pueblo, ni el cordero de los judíos, ni el cordero de ningún dueño humano, mas bien el Cordero de Dios. Cuando el Cordero por fin fue sacrificado, no fue porque fue una víctima de aquellos que eran más fuertes que El, mas bien porque estaba cumpliendo Su deber voluntario de amar a los pecadores. No fueron los hombres quienes ofrecieron este sacrificio, aunque fueron los hombres quienes sacrificaron a la víctima; fue Dios mismo Quien se dio a Si Mismo. “sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir… no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación.” (1 Pedro 1:18-19)

 

San Juan el Evangelista… estaba parado al pie de la Cruz cuando el Cordero fue sacrificado. Años más tarde, él escribió que el Cordero sacrificado en el Calvario fue destinado para eso desde antes de la fundación del mundo. La Cruz no fue una ocurrencia tardía. “… el Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo.” (Apocalipsis 13:8) Esto significa que el Cordero fue sacrificado, por así decirlo, por decreto Divino desde toda la eternidad, aunque el cumplimiento temporal tuvo que esperar el Calvario. Su muerte fue según el eterno plan de Dios y el consejo determinado de Dios. Pero el principio de un amor que se sacrifica a si mismo era eterno. La redención estaba en la mente de Dios antes de la fundación del mundo. Dios, Quien está por fuera del tiempo, vio desde toda la eternidad la caída, y la redención, del ser humano.”

 

 

(Capitulo 4, pgs. 132-137)

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