Nuestro Lugar de Refugio, Hotel Los Vinedos

Nuestro Lugar de Refugio, Hotel Los Vinedos

Lunes, julio 9 del 2012

¡Buenas tardes, amigos! ¿Cómo están este lunes 9 de julio? Es otro día asoleado y calurosito aquí en Armenia, con una leve brisa, y el canto de los pájaros y el zumbido de insectos en el aire. Un día perfecto para … volver a escribir.

Porque no escribí nada en toda la semana pasada. Primero, no estuve en la ciudad – después de un mes de mucho trabajo muy arduo en nuestra iglesia, como familia y como Equipo Pastoral tomamos unos días de descanso en nuestro lugar de retiros preferido: Hotel Los Viñedos. Y segundo, tenía que tomar un tiempo para despejar mi mente de tantas situaciones complicadas que tuvimos que manejar en nuestra comunidad en el mes pasado. ¡Fue un descanso maravilloso! ¡Y disfruté todo: el sol, el agua, una caminata larga, jugando billar y ping-pong, leyendo, las comidas, la compañía de mi familia y unos buenos amigos, mis tiempos a solas con Dios en el super-balcón de nuestra super-habitación con una super-vista – todo fue espectacular!

Como pareja y como familia, hemos estado yendo al Hotel Los Viñedos por unos 12 años. Es un lugar a solo una hora y media de la ciudad de Armenia, pero allí se encuentra otra topografía y otro clima: en vez de las montañas verdes llenas de café y plátano y el clima fresco del departamento del Quindío – es puro Valle del Cauca, plano y caliente con las cordilleras a la distancia. El hotel está situado en una pequeña montaña, en la mitad de la gran planicie del valle, al pie del pueblo de La Unión y de la Cordillera Occidental. Desde el hotel, que es hermoso en sí, hay una vista preciosa a 360 grados: por un lado hacia la extensión del valle con sus miles de hectáreas de sembrados de azúcar, frutos y uvas – y por el otro lado, hacia el pueblo de La Unión y las montañas de la cordillera. De día o de noche, es una vista que nunca cansa, y siempre produce gratitud y alabanza en el corazón.

En ese lugar, me encanta todo: poder descansar y disfrutar en pleno, deleitarme en el sol y en el agua, caminar y jugar y leer rico, comer delicioso, gozar y reírme con mis compañeros de paseo – pero más que todo, poder encontrarme cada vez que voy de una manera muy íntima  y especial con mi Señor Jesucristo: sentirlo cerca, deleitándose en mi, abrazándome, hablándome, guiándome. El Hotel Los Viñedos ha llegado a ser un lugar “consagrado” y “santificado” para mí, porque es un lugar en donde siempre tengo un encuentro profundo con Dios. Esta vez que fuimos, lo sentí hablándome de Quién es a través de los muchos nombres que se le han asignado: Yeshua, el Nazareno, la Aurora de lo alto, la Consolación de Israel, el Cuerno de Salvación, el niño Jesús … cada nombre describiendo una sola faceta de un ser infinito, inagotable, multidimensional, polifacético. ¡Cómo no amar a semejante Salvador y Señor! ¡Cómo no rendir y postrar mi corazón delante de Él en gratitud y adoración!

El Hotel Los Viñedos tiene su encanto especial para mí. Siempre cuando llego, siempre cuando me voy, pienso en las palabras de Sofonías 3:17 que describen perfectamente mi experiencia en ese lugar de refugio: “Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos.”

Amig@: ¿tú tienes un lugar similar en tu vida? ¿Un sitio único que te descansa, que te refresca, que te inspira, que te llena de gozo y paz y amor? Si sí, agradéceselo al Señor, y disfrútalo al máximo – si no, pídeselo a Él, porque seguramente tendrá un lugar de refugio esperándote. “En Dios solamente está acallada mi alma; de Él viene mi salvación. El solamente es mi roca y mi salvación; es mi refugio …” (Salmo 62:1,2ª)

•    Hoy, y en los próximos días, una nueva Galería de Fotos – Hotel Los Viñedos – con varios álbumes. Que disfruten las fotos de nuestro lugar de refugio.
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