Jesús una vez proclamó a Sus discípulos: “YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA.” ~Juan 14:6
Por lo tanto, el único camino hacia adelante en esta vida es JESUS, el Camino mismo.
DÍA 15: Sabes que estás en el camino cuando confías en que la única forma en que todas nuestras olas pueden dividirse es si le damos a Dios toda nuestra atención no-dividida.
Deja que la quietud primero se convierta en atención: siempre tienes que ubicar primero tu alma, para que sepas dónde estás en relación con Dios, si vas a tener una relación con Dios.
¿Qué está pasando en tu alma? ¿A qué estás prestando atención? La devoción crece dondequiera que esté nuestra atención.
Es tan natural como la necesidad de respirar, esta necesidad de ser atendido. Todos anhelamos ser vistos, ser conocidos, que se nos preste atención. La atención de y la atención a este mundo viene con un precio muy alto: el costo de nuestras propias almas. Las cosas de este mundo no están a la altura de ninguna de nuestras expectativas.
En nuestra atención a Dios, encontramos que somos atendidos. Todo puede ser atendido después de prestar atención a Aquel que tan tiernamente nos atiende a nosotros. Su atención no está dividida, no es atraída en muchas direcciones, como la nuestra. Su atención está fijada completamente en ti. La única forma en que nuestros mares pueden dividirse es si le damos a Dios toda nuestra atención no-dividida.
