UN DEVOCIONAL DE ADVIENTO: TOMA ALIENTO - Domingo y Semana 3

UN DEVOCIONAL DE ADVIENTO: TOMA ALIENTO - Domingo y Semana 3

Domingo Diciembre 12, 2021

 

NAVIDAD EN LA HISTORIA DE LA BIBLIA: 

LA PAZ EN MEDIO DE LA TRIBULACION

 

 

SEMANA TRES

UN NACIMIENTO, GLORIA Y PAZ:

LA REDENCION REALIZADA

(LUCAS 2)

 

La tensión entre la realidad de la Caída se ve en el pecado y el castigo, y la promesa de la redención es un tema constante a través de las Escrituras. Era evidente en la maldición pronunciada por Dios después de la Caída de Adán y Eva (Génesis 3:14-19), con la promesa de la descendencia, el “protevangelium”, declarada en el medio de la maldición (Génesis 3:15). Isaías nos informa de esta verdad, y afirma la promesa de un hijo cuyo nombre seria Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Este hijo seria el rey cuyo reino seria por siempre y sobre todo, y su reino seria marcado por la paz, la justicia, y la santidad (Isaías 9:1-6).

 

Israel junto a todas las naciones esperaba este hijo quien establecería un reino y un imperio desde el trono de David. Falló rey tras rey. Al cerrar el canon del Antiguo Testamento, Dios vuelve a prometer que enviara a Elías el profeta antes del día de Jehová, grande y terrible (Malaquías 4:5-6; y Lucas toma este texto [Lucas 1:17] para referirse a Juan el Bautista). Y de allí apareció, y Dios se mantuvo callado. (Y aunque Dios se mantuvo en silencio, no estuvo ausente. Su plan soberano y seguía adelante hacia su cumplimiento.) Por 400 años no hubo palabra del Señor. Finalmente, cuando “vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos” (Gálatas 4:4-5). El precursor del Mesías fue Juan el Bautista. Cuando el apareció en la escena, se rompió el silencio. En este momento de la historia de la redención, Dios no solo hablo de nuevo a través de Juan el Bautista, pero habló definitivamente a través del Hijo (Hebreos 1:1-2).

 

Pausemos un momento antes de seguir adelante. Jesús declara que en este mundo enfrentaremos tribulaciones, pero que en El tenemos paz porque ha vencido al mundo. Para poder entender esta declaración junto a la persona y la obra de Cristo, hay que entender la historia de la Biblia. En nuestro estudio de la declaración de Jesús dentro del contexto de la Biblia, hemos cubierto la Creación y la Caída, y ahora estudiamos una sección acerca de la Redención. Como mencionamos posteriormente, la promesa aparece inmediatamente después de la Caída, y llega a cumplirse en la persona y la obra de Jesucristo. Todos los detalles de la redención, según un escritor, “apunta al momento más crucial en toda la historia de la salvación: el nacimiento, ministerio, muerte, resurrección, y ascensión de Jesús el Mesías.”

 

Hoy observamos el comienzo de esta culminación, el nacimiento de Jesús. Esta es la realidad de la Navidad que celebramos, y verdaderamente, hay mucho para celebrar.

 

María, Los Angeles, y Los Pastores

 

El ángel Gabriel aparece a María en el sexto mes del embarazo de Elizabeth (cf. Lucas 1:5-24, 39-45, 57-80). Él le informa que ella concebirá y dará a luz a un hijo que se llamará Jesús (1:31). José, el hombre justo que se va a casar con María, viene de la casa de David (1:27), y “y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin” (Lucas 1:32-33). Eso nos recuerda de las palabras de Isaías. La promesa acerca a su cumplimiento. Sin embargo, María es joven, no es casada, y es virgen. ¿Cómo concebiría y daría a luz? (1:34) Gabriel responde a su pregunta y concluye, “nada hay imposible para Dios” (1:37). (Zacarías también hace una pregunta, pero su pregunta viene de la duda, y él sufre por eso.) María responde, “He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia” (1:38). Ella responde con una palabra de alabanza, conocida como el Magnificat (1:46-55).

 

También vemos a los ángeles anunciar el nacimiento de Jesús: “Había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño. Y he aquí, se les presentó un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor; y tuvieron gran temor. Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor. Esto os servirá de señal: Hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre. Y repentinamente apareció con el ángel una multitud de las huestes celestiales, que alababan a Dios, y decían “!Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres!” (Lucas 2:8-14)

 

Aquí se cumple la promesa de la redención. La “descendencia” prometida ha llegado. El nacimiento es “nuevas degran gozo que será para todo el pueblo.” ‘Buenas Nuevas’ es el término que ocupamos para referirse al Evangelio. Este evangelio trae gran gozo y su mensaje no se reserva solamente para los judíos, sino que se entrega a todas las naciones. Es para todos, y es exclusivo. Las nuevas de Jesús son buenas nuevas para todos, y son las únicas buenas nuevas para todos. Él es el Salvador, Cristo el Señor. A través del Hijo, el Padre se glorifica y en el Hijo, todos los que afirman este evangelio experimentaran la paz.

 

En este contexto, y anticipando el futuro ministerio de Jesús, es importante recordarnos del texto que estudiamos en Juan 16:33, el hecho que enfrentamos tribulación y la verdad que lo acompaña, que experimentamos paz en Cristoal medio de la tribulación. Muchas veces nos olvidamos que el nacimiento sereno y tranquilo que presentamosen nuestras obras de teatro no es tan real. Cuando nació Cristo, no solo cantaron los ángeles, pero los demonios se sintieron amenazados porque supieron que era corto el tiempo que les quedaba (cf. Apocalipsis 12:10-12). Jesús vino a destruirlos a ellos y a sus obras (I Juan 3:8; Hebreos 2:14-15). Mateo se refiere a este plan de Satanás para matar, robar, y destruir (Juan. 10:10) a través de las estrategias de Herodes (Mateo 2:3, 16). Cuando nació Jesús, Herodes se sintió amenazado porque habría un rey rival. En su intento de controlar eso, mato a todos los bebes que tuvieran dos años de edad o menos.

 

Volviendo al tema del nacimiento de Jesús, notamos que los pastores determinaron averiguar si eran ciertas las buenas noticias anunciadas por los ángeles. Encontraron todo exactamente como habían dicho los ángeles, y eso le contaron a María y José. Después de escuchar las buenas nuevas, “volvieron los pastores glorificando y alabando a Dios por todas las cosas que habían oído y visto, como se les había dicho” (2:20).

 

Simeon y Ana

 

Finalmente, observamos no la respuesta de Simeón y Ana a Jesús cuando lo llevaron al templo. Simeón fue conocido como “justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él” (Lucas 2:25). Cuando vio a Jesús, lo tomó en brazo y exclamo (Lucas 2:29-32): “Ahora, Señor, despides a tu siervo en paz conforme a tu palabra; porque han visto mis ojos tu salvación, la cual has preparado en presencia de todos los pueblos; Luz para revelación a los gentiles, Y gloria de tu pueblo Israel.”

 

A través de Cristo, se cumplen las promesas de Dios y llega la salvación para todos. Eso trae paz para las personas y las prepara para irse, para morir, y solo los que viven así están realmente vivos.

 

Escuchamos algo parecido de Ana. Ella había dedicado su vida a servir en el templo, que se describe de esta manera, “sirviendo de noche y de día con ayunos y oraciones” (Lucas 3:27). Cuando vio al niño Jesús, “daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención en Jerusalén” (Lucas 2:38).

 

¡Venid y adoremos a Cristo el Señor!

 

Preguntas

 

1. ¿Qué podemos aprender de estos eventos, personas y respuestas que rodean el nacimiento de Jesús?

2. A María se declara, “nada hay imposible con Dios.” ¿Hay situaciones o circunstancias en tu vida donde es necesario recordarte de esta verdad acerca de Dios y sus promesas? ¿Cuales?

3. Respecto al mensaje de los ángeles, ¿Tú crees que el nacimiento de Jesús, Su encarnación, y las buenas nuevas de gran gozo serán para todos? ¿Qué te detiene en anunciar las buenas nuevas, el evangelio, que es para todas las naciones? ¿Qué te quita el gozo?

4. Junto a los pastores, ¿cómo pretendes glorificar a Dios y alabarle en esta Navidad... y después?

5. Como el ejemplo de Simeón, ¿has experimentado la paz con Dios a través de nuestro Señor Jesucristo para que estés preparado no solo para morir, pero para vivir de verdad?

 

Himno: (Hark the Herald Angels Sing) Se Oye un Son en Alto Cielo

 

Oracion

 

Padre nuestro en los cielo, te agradecemos por esta encarnación de Tu Hijo, Jesús nuestro Salvador, quien es Cristoel Señor. Perdónanos cuando esta historia llega a ser muy familiar y lo tratamos como una obra de teatro en vez de considerarlo como la verdad que transforma las vidas. Confesamos que aunque afirmamos que Jesucristo es Señor, muchas veces vivimos como si nosotros nos mandáramos solos. Perdónanos. En esa temporada de Navidad, queremos vivir en la plenitud de paz con Dios, y de este gran gozo, queremos glorificarte y alabarte en palabra y en hecho. Eso pedimos a través de tu Hijo, Jesucristo, nuestro Señor y Salvador. Amen.

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