Aunque me deleito en la intimidad que puedo tener contigo, no la quiero abusar, al olvidar quien eres. Como Tu hijo, me siento en Tu regazo, en dulce comunión. Pero como Tu súbdito, me postró a Tus pies en alabanza y adoración. Dios Todopoderoso, Rey del Universo, Padre y Amigo, alabo Tu Nombre!
Señor, ayúdame a planear para que lo urgente no siga conquistando lo importante. Porque un día, quizás más rápido de lo que pienso, lo importante se volverá lo urgente! Dame la sabiduría y dame la voluntad para poner lo primero primero.
Señor, Tú sabes que muchas veces tengo grandes ideas – tan grandes que las postergo! Y aun las que empiezo bien, raras veces las termino. No quiero ser como un Sal de Frutas – todo burbujeo, y luego nada! Dame la gracia para empezar pequeño en vez de no arrancar con nada.
Señor, Te doy gracias porque Tu siempre eres bueno. A veces lo reconozco, como ahora, y a veces no. Pero quiero afirmar que, si lo reconozca o no, Tú sí siempre eres bueno! Y Te doy gracias!
